Todo empieza en el torneo "Zen Nihon Ishu Kakutogi Taika" (Campeonato de Todo Japonés de Artes Marciales) donde Kyo Kusanagi llega a las semifinales y le toca pelear contra Goro Daimon, que es un famoso luchador de Judo, Goro pierde contra Kyo y pasa a la final para enfrentarse a Benimaru Nikaido. Esta es una pelea muy reñida pero al final Kyo vence a Benimaru, proclamándose campeón del torneo.

                     

Tiempo después un nuevo villano se estaba abriendo camino entre los más malvados villanos: Rugal Berstein. Rugal era un hombre que tras años de dedicación a negocios ilegales, había conseguido prosperar y ser el mayor traficante de armas y de drogas en el mundo. Se comentaba que su fortuna era tal, que tenía su propio portaaviones, el Blacknoah, el cual lo utilizaba nada menos que como transporte personal en sus andaduras alrededor del mundo. De esta manera los gobiernos internacionales se veían siempre con serias dificultades a la hora de localizarlo y darle caza. Y de esta manera Rugal, conseguía mantener a raya a sus demás enemigos ya que el Blacknoah estaba fuertemente armado. No obstante en el cuerpo a cuerpo, Rugal también era peligrosísimo, pues dominaba a la perfección una serie de técnicas de artes marciales que le hacían invencible ante cualquier adversario que tuviera la temeridad de atreverse a enfrentarse a el. De hecho, se sabe que muchos son los luchadores que se atrevieron a plantarle cara, pero desgraciadamente ninguno salió con vida de esa pelea.

                                                     

Para este año, Rugal tuvo la idea de reflotar el torneo King of Fighters, que tanto éxito tuvo los años anteriores, Pero en esta ocasión habría nuevas normas. En esta ocasión The King of Fighters consistiría en combates por grupos, el cual cada grupo pertenecería a un país determinado y estaría constituído por 3 luchadores diferentes. Los enfrentamientos serían uno contra uno hasta que uno de los equipos venciera al otro, y así pasaría a la siguiente ronda, hasta la final que enfrentaría el equipo ganador a Rugal. Ahora que las normas estaban establecidas, era el momento de enviar las invitaciones. Mature, secretaria personal de Rugal, envió ocho sobres blancos con el sello de Rugal a los destinatarios correspondientes para el torneo.

Estas invitaciones fueron enviadas a ocho países del mundo: Estados Unidos con la participación de Heavy D!, Lucky Glauber y Brian Battler, Japón, con el equipo formado por Kyo Kusanagi, Benimaru Nikaido y Goro Daimon, Inglaterra, el único equipo formado por mujeres (Mai Shiranui, King y Yuri Sakazaki), Italia, equipo formado por Terry, Andy y Joe, México, con la participación de Ryo Sakazaki, Robert Garcia y Takuma Sakazaki), Corea, (con Kim Kaphwan, Chang Koehan y Choi Bounge), China, representada por Athena Asamiya, Sie Kensou y Chin Gentsai, y por último Brasil, representado por Clark, Ralf y Heidern.

Pero poco antes de dar comienzo el torneo, una misteriosa figura irrumpe en los aposentos de Rugal, dispuesto a pararle los pies justo antes de que de comienzo el torneo...Ajeno a esto, los combates comienzan con las nuevas normas como gran novedad. Los espectadores podían tener la oportunidad de ver a los mejores luchadores del mundo enfrenándose entre si en una serie de combates, hasta la gran final donde se enfrentaron el equipo de Japón (Kyo, Benimaru y Goro) y el equipo de Italia (Terry, Andy y Joe) quienes se enfrascaron en una muy dura batalla, donde al final Kyo Kusanagi y Terry Bogard quedaron de pie, ambos dieron el golpe final y decisivo con el choque de sus ya famosas tecnicas especiales pero al final esta vez ganó el equipo de Japón.

Una vez otorgado el título al equipo de Japón, este fue invitado por Mature, una de las secretarias de Rugal, a subir a bordo de un helicóptero que finalmente les llevaría al buque de Rugal, el Blacknoah y una vez allí, tuvo lugar el último enfrenamiento de esta edición de The King of Fighters, y cuando Mature les llevó hasta su anfitrión, estos pudieron ver horrorizados como la sala en donde se encontraban estaba repleta de estatuas que correspondían con los luchadores que habían retado a Rugal tiempo atrás, y este les explicó que dichas estatuas realmente eran los luchadores derrotados a los que les había recubierto de una capa de acero, para así tener un recuerdo de sus victorias para toda la eternidad.

Aunque el anfitrión estaba confiado de tener este destino reservado para ellos, los luchadores del equipo de Japón se enfrentaron valientemente a Rugal, pero desde el primer segundo quedó patente que este no tenía rival, pues sus ataques, aprendidos de la misma técnica que usaba Gueese o Wolfgang, eran absolutamente devastadores. De los tres luchadores, tan solo Kyo era capaz de hacer mella en Rugal, ya que tanto Benimaru como Goro no eran lo suficientemente fuertes como para derrotar al villano. Tras una encarnizada lucha, Rugal vence a estos dos, quedando en pie únicamente Kyo, el cual trata desesperadamente de vencerle, sin éxito.

Tras recibir unos golpes durísimos, Kyo parece no tener opciones pero en ese momento, ve una sombra en un rincón de la estancia, y al cabo de un momento, puede darse cuenta de que se trata de su propio padre, Saisyu Kusanagi, aquella figura misteriosa que había intentado sin éxito pararle los pies a Rugal antes del evento. Eso le encolerizó de tal modo que, haciendo acopio de toda su rabia y de todas sus últimas fuerzas, propinó un golpe tremendo a Rugal con su ataque del torbellino de llamas escarlata, venciéndole in extremis en una batalla que aún hoy en dia se recuerda.

Pero Rugal no pensaba quedarse de brazos cruzados tras la derrota. Haciendo gala de un nulo espíritu de competición, cogió un detonador que estaba conectado con explosivos puestos en diversos puntos del buque, y pulsó el botón, haciendo estallar el barco, hundiéndose poco a poco. Tras una frenética carrera hacia cubierta, el equipo de Japón consigue escapar por poco, y pueden ver cómo el Blacknoah se hunde lentamente en el mar. Sin duda una edición del torneo muy reñida, y donde nuevamente se quedaba sin anfitrión para el año siguiente, o al menos eso parecía...